Mi cabeza, mis manos, todo mi cuerpo, toda yo, estoy aquí.
Pero mi mente se va lejos a quien sabe donde.
No viaja a playas ni a ningún paraíso terrenal, se va a donde estas tú.
Donde mis heridas se vuelven a abrir y tu amarga indiferencia me arde terriblemente.
Quisiera pasar toda la vida contigo.
¿Por que me arrancas de ti?
Quiero volver a sentirte.
Quiero que pasemos miles de veces otra vez por esa vereda que nos llevaba a ese cercano sitio de amor.
Me dueles mucho.
Ahora las cosas se deshacen enfrente de mi antes de que las toque.
Vuelve a hacerme real.
Mi mundo se esta volviendo de fantasía.
Tu recuerdo me marea, hace que me duela la cabeza.
Todas mis esperanzas retrocedieron con tus palabras.
¿Por que te has vuelto tan insensible?
¿Ya no te duele verme?
Siento como si te burlaras de mi, de mi dolor.
Ya no me quieres, no.
¿Como me resigno?
¿Como cierro mis ojos?
Aun me haces falta para ver el camino.
No tienes por que irte, ven conmigo, llevame.
Te amo, eso no se olvida de un día para otro.
Tú lo dijiste.
Me haces sentir desesperada, angustiada a mas no poder.
Como si por dentro estuviera llena de limones y como si cerraran mi nariz.
Ya ni puedo respirar.
Me siento como un cadáver caminando por estas calles oscuras y frías, llenas de gatos y de basura.
No se cual sea mi mayor consuelo.
Me da miedo el mundo, me doy miedo yo.
Creo que es hora de que empiece a hablar en singular.
Ya no quieres ser parte de mi.
Ya no existimos, ni existiremos.
Ahora solo me acompaña mi sombra, y por instantes desaparezco.
La muerte se mete por mis poros; llena mis pulmones...
Me oculto tras mis piernas y acepto la verdad.
Me alejo de ti, y creo que empiezo a renacer.
Triana
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